Tuesday, January 29, 2008

Zzz...



Hace tiempo que he dejado de bailar, a mi pesar, al ritmo de la luz natural. El hecho de que las clases que me quedan en la facultad no empiezan hasta mediados de febrero (con lo cual nadie me va a castigar si no madrugo), en combinación con el café que tengo por costumbre tomar a golpe de las seis de la tarde, hace que me haya convertido en un híbrido entre lechuza y marmota sin llegar a ser ninguna de las dos: no consigo conciliar el sueño hasta pasadas las 3 de la mañana (a veces, bien pasadas), lo cual implica que me despierte como a las 11, cuando la gente normal ya ha desayunado, sacado al perro, hecho footing, se ha pegao la ducha y por lo general lleva un buen rato trabajando -o mirando páginas guarras- en la oficina. Y esto, que parece una tontería, tiene sus consecuencias: mi despertador biológico, que es mi madre cuando le sube la mala leche (siempre funciona, eso sí) opina que soy una rémora (literalmente); y además uno se siente mal, oye, que el tiempo es más aprovechable por las mañanas que por las noches, cuando no puedes hacer ruido porque hay que dejar que la gente formal sueñe con sus tonterías.


Así que hoy, y lo declaro pública y blóguicamente, voy a intentar acortar ese desfase horario que me tortura la mente y anquilosa el cuerpo (más), aunque me temo que eso pasa por cansarme de alguna manera (me han dicho que hay una cosa que se llama "deporte", espero que no sean pastillas que me sientan fatal al estómago) y cambiar el café por el colacao para estar a la 1 en la cama como mucho, y mañana levantarme a una hora normal, y aguantar todo el día sin dormirme y sin café que valga.


Madruguen, madruguen, que como dice el refrán, "al que madruga le da tiempo a más cosas", o algo así era. Abrazos de mediodía.

12 comments:

Anonymous said...

Cecil... madrugar es lo peor del mundo. Por eso yo soy tan feliz los fines de semana.
Un besito,
Norma Marmoten

P.d.: he de decirle que luego me gustó mucho el post, pero es que ese principio... "Hace mucho tiempo que he dejado de bailar"... de repente me trasladó a no sé muy bien donde, incluso, me ha dado un pequeño vuelco el corazón... no sé qué historia mágica me esperaba.
Sería un buen nombre de blog...
Besos

Cecil said...

Uy, ¿es una frase de una peli o algo? No caigo. ¿Proust bailaba con las magdalenas?

Lamento de veras que la historia que se ha encontrado no sea precisamente mágica, sino más bien prosaica y aburridamente cotidiana... Lo lamento, por ambos.

Anonymous said...

Nooo... es que es bonita, sin más. Y hacía mucho tiempo que no bailaba, ahora lo hago un poco más.
Prepárese para el tango!!!
Muaa

Madame M said...

Madame se acuesta, de media, a las tres de la matinal. Madame se levanta, sin ningún pudor a las once/once y media. A Madame le da tiempo a currar, comer, dormir siesta (sí, Madame no es humana: ye una marmota), merendar, currar otro poquillo, pimplarse una Mahou, cenar, ver House, currar otro poquillo o ver páginas marranas y doblar. Algunos días hasta tiene relaciones sexuales. A Madame no le da tiempo a limpiar y recoger el hogar, pero con acostumbrase. Madame nunca tiene ojeras. Pero, claro, tiene a Materna a 125 kilómetros...

Davidik said...

Pues Davidik se levanta a las... ufff, mejor lo dejo que ya me he deprimido bastante con el post y los comentarios. ¡¡¡¡Qué envidia me dais!!!!!!!!
No, si el post me ha gustado, pero me gustaría más si no tuviera que salir de casa cuando aún no han puesto las calles. Y eso que en mi caso materna está a miles de kilómetros...

Anonymous said...

Así estoy yo ahora!.....desde mis años de estudiante no había vuelto a dormir como ahora y la verdad es que no sé si acaba de gustarme. Me acuesto cuando me apetece, pero suele ser como a la una y media, el rato de lectura que suele ser una media hora, ya son las 2. Si estoy tranquila duermo del tirón pero hay veces que tengo pesadillas (¿será mi conciencia?)....a eso de las 11 me levanto....hay día que cae una siesta....me encanta dormir, pero ¿tengo que buscar trabajo?. Bss

A corderetas con mi alma: "Corde" said...

Pues yo madrugo sin madrugar y trasnocho sin hacerlo... ¿Alguien lo entiende? Porque yo lo único que noto es un cansancio de mil pares.
Aproveche querido Cecil, que ya vendrán los madrugones...

Davidik said...

Y yo, Corde, vivo sin vivir en mi. En fin, acabo de llegar a casa y mañana me levanto a las 5.45 am, y digo que no pienso volver a entrar en los comentarios de este post, que me muero de envidia.

Anonymous said...

¿quién no ha sentido la cálida y alegre sensación de despertarse un sábado temprano, pensar equivocadamente que es otro día, un martes por ejemplo y que hay que ir a currar y, de repente caer en la cuenta de que es sábadooooo!?
Cecil, recupera tus mañanas y no temas: durmiendo también se aprovecha el tiempo, mira a Little Nemo.

Anonymous said...

Yo me levanto de noche y empiezo a trabajar de noche (lo sé, Davidik, es un horror) aunque no llego a tu tempranez ni de coña (¿tempranez? creo que esta palabra me la acabo de inventar).
Cecil, este post podría estar firmado por mi hijo, y yo, bien podría ser su madre. Pero usted me ha hecho recapacitar un poco, porque nunca me dió por pensar mi hijo pudiese sentir cargo de conciencia como usted, por vivir así. Pensaré en ello.
El caso es que hay que aprovechar los tiempos ociosos para hacer el tipo de vida que, de otro modo, no podríamos hacer, y si le gusta trasnochar y dormir, y puede permitirselo, pues ya está.
Un besito con bostezo incluído

Davidik said...

A mi me ha pasado muchas veces lo que dice lord palumbo, lo malo es que luego caigo en que los sábados por la mañana tengo que ir a clase de ruso, así que me tengo que levantar igualmente. Lo dicho, que no tengo remedio.
¿Yo no había dicho que no volvería a entrar en este post? vaya, ha sido sin querer...

Cecil said...

¡Yolki-palki!